Por Eli Jerónimo
¡Muy buena técnica! ¡Qué padre ejecución! ¡Cuánto has avanzado! Es padre escuchar estos comentarios, se siente bien cuando la gente reconoce tu trabajo. La danza es algo que se aprecia; el ritmo, la música y movimientos forman un solo lenguaje.
Pero, quiero preguntarte algo: ¿qué está viendo Dios en tu corazón? Avanzar en técnica y rezagar nuestra vida espiritual muestra un desequilibrio que hay que atender inmediatamente. No podemos decir: “¡Danzo para Dios!” “¡Amo a Dios y él es el motivo de mi danza!” y de nuestra boca están saliendo críticas, calumnias, chismes, incluso maldiciones.
¡No te estanques!
La Palabra de Dios confronta. Si hay algo que no anda bien, detente unos minutos y ora a Dios, Él siempre se revelará cuando lo buscas con sinceridad. Si sabes que algo anda mal en tu vida no lo ignores ni tampoco prolongues la cita con Dios. Permite que la Palabra de Dios te confronte, renueve y transforme en todo lo que sea necesario.
No permitas que un error, una equivocación, un pecado no confesado estanque tu relación con Dios. Al contrario, dice su palabra: Vuelve ahora en amistad con él, y tendrás paz; y por ello te vendrá bien (Job 22:21).
Danzarina, siempre recuerda:
- Danza para Cristo, pero hónralo con tus pensamientos
- Disfruta danzar, pero ama a tu prójimo.
- Danza porque amas a Dios, pero obedécelo.
- Ensaya, pero no te olvides de leer Su Palabra.
- Enseña nuevas rutinas, pero también instruye con su Palabra.
- Escucha música, pero no olvides de escuchar Su voz.
Academia de Danza & Artes Creativas. 2016
Muchas gracias por todo creo k necesitaba escuchar esas palabras
Me gustaMe gusta
Nos da gusto que sea de bendición. Sigue leyéndonos, bendiciones!
Me gustaMe gusta